domingo, 7 de febrero de 2021

Equipo 5. La educación impartida por particulares

 Introducción

El trabajo que presentamos a continuación habla sobre la educación privada y  todo lo que esto conlleva. Se pretende exponer las ventajas y las desventajas del sector privado en la educación, también se hablará sobre el manejo de una escuela privada y lo que se requiere para  poder hacerla oficial y reconocida por la Secretaría de Educación Pública.

Al final se brindarán herramientas para que el lector pueda realizar su propia conclusión o que pueda juzgar si es bueno o no que los alumnos asistan a una escuela privada y cual es el verdadero contexto que se necesita para que un niño pueda aprender.


La educación privada. 


Se cree que en las escuelas privadas se imparte una educación de “mejor calidad”, la sociedad tiene la idea de que entre más cara es mejor, pero ¿realmente es así?. 

Es claro que sí existen excelentes escuelas y colegios particulares, pero las colegiaturas no definen su calidad. El maestro, quien es el que proporciona realmente el servicio educativo, una infraestructura de calidad: canchas deportivas, espacios abiertos, cafetería, aulas virtuales, baños suficientes, vigilancia, personal uniformado, salas de cómputo, talleres, espacios recreativos, eventos deportivos, etc., que si bien significan elementos para el proceso formativo, no lo son, necesariamente, de una buena educación en la totalidad para la formación académica como tal.

Las escuelas de paga son la única opción para solventar grandes vacíos que existen en la educación pública en tres áreas fundamentales para la dinámica de la vida actual: 1. horarios extendidos, 2. impartición de inglés y 3. acceso a la tecnología. Para todos ellos hubo grandes planes que nunca se resolvieron


¿Qué hacer para que un colegio privado tenga reconocimiento oficial? 

Según el Capítulo V, Artículo 54 de la Ley General de Educación, los particulares podrán impartir educación en todos sus tipos y modalidades. Por lo que concierne a la educación preescolar, la primaria, la secundaria, la normal y demás para la formación de maestros de educación básica, deberán obtener previamente, en cada caso, la autorización expresa del Estado, tratándose de estudios distintos de los antes mencionados podrán obtener el reconocimiento de validez oficial de estudios.

La autorización y el reconocimiento serán específicos para cada plan de estudios.  

Dicho reconocimiento solo se dará cuando los solicitantes cuenten con: 

  1. Personal que acredite la preparación adecuada para impartir educación 

  2. Con instalaciones que satisfagan las condiciones higiénicas, de seguridad, pedagógicas y de accesibilidad que la autoridad otorgante determine. 

  3. Con planes y programas de estudio que la autoridad otorgante considere procedentes. 

Y de acuerdo con el Artículo 58, las instalaciones que reciban esta validación serán monitoreadas por lo menos una vez al año. 

En caso de no tener la validez necesaria, se hará saber a quienes reciban este servicio pero bajo ningún precepto dichas instalaciones dejarán de cumplir el estándar mínimo de higiene. 

¿Es recomendable la educación privada? Tomando en cuenta la salud emocional del niño. 


En México, estudiar en una escuela privada no garantiza tener una mejor educación que hacerlo en una pública. Es el contexto socioeconómico del alumno, así como el ambiente familiar y escolar.

Además existen escuelas privadas en las cuales se les exige demasiado académicamente a los niños y eso también puede afectar en su salud emocional, por que ellos mismos empiezan a exigir a  sí mismos sin darse cuenta. 

Más que la segregación social, la falta de oportunidades, o si se estudia en un plantel público o privado, es el entorno donde se desarrolla el estudiante lo que define su educación, por lo tanto si un joven tiene el contexto adecuado puede tener un buen rendimiento aunque su origen sea de escasos recursos.




Polémica entre sector público y privado 


Mucho se ha hablado de México como un país de contrastes, como un país de grandes contradicciones y hasta un país surrealista, y todo eso se acerca, paradójicamente y en gran medida, a la realidad, siendo, pues, que solamente nosotros nos entendemos.

Cuando en México se ponen en la mesa de las discusiones los temas educativos, se habla de la educación pública, cuando se habla de los maestros, se habla de los maestros normalistas y/o que trabajan en los sistemas federales o estatales, mas no se menciona a los maestros que laboran en instituciones privadas o de la evolución de la educación particular, salvo cuando se trata de las pruebas estandarizadas, al menos no de manera oficial. 

Las escuelas particulares se rigen por el esquema de las empresas privadas, son empresas estructuradas como tales y, como tales, se rigen por las leyes del mercado y de la libre competencia, sus alumnos, o mejor dicho, los padres de sus alumnos, son considerados clientes a los que se les ofrece un producto llamado educación, cuya diversidad, calidad, disponibilidad y precio son relativos, generando en el cliente el concepto erróneo de que entre más cara sea una escuela, mejor será la educación que proporcione.

Estamos totalmente en desacuerdo de esta idea, pues la escuela no forma a los alumnos, tampoco un buen profesor significa todo, creemos que es la relación que se forma con el alumno, no porque deba construir su propio aprendizaje sin la ayuda de nadie. Consideramos que el aspecto social (la convivencia) tiene un gran impacto en el desempeño y avance que se pueda lograr, son cuestiones circunstanciales y subjetivas que es imposible poder calcular. 



Conclusiones


Es claro que México debe empezar por invertir mejor en la educación, debe elevar la calidad de la educación a través de la investigación, los programas educativos de calidad y sobretodo la evaluación externa, objetiva y precisa.

No todos los mexicanos tienen la economía para pagar su educación en un sector privado , con educación de primera y educación de segunda, y el gobierno no hace nada para que la educación pública se libre de burocracia y sirva como trampolín para el desarrollo familiar.

El estudiar en una escuela privada no garantiza una mejor educación, es verdad que pueden tener mejores instalaciones, pero la educación de calidad la hacen los maestros, los alumnos. 

Así estudies en un sector privado o público si quieres concluir una carrera, cumplir tus objetivos, esto no será un obstáculo, siempre y cuando tengas esa motivación y esas ganas de sobresalir. 

 



Bibliografía 


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